¿Sabías que desde el comienzo de la humanidad los diferentes sabores de los alimentos han cautivado al ser humano?
Desde incluso antes de Cristo, la gastronomía siempre fue un deleite para las personas. Diferentes platos se han creado y perfeccionado. ¿Quién podría por ejemplo no haber probado una pizza, una hamburguesa, papas fritas, un helado, una rica pasta y muchos otros platos? No cabe duda que son comidas que nos hacen activar nuestras glándulas salivales y nos dan ganas de comerlas.
En este artículo no te diremos que no puedes comer nada de esto. Al contrario, no se trata de dejar de comer cosas para tener una buena salud, sino de ser equilibrado.
La mayoría de los alimentos que conoces, ingresan al organismo después de haber pasado por todo tu sistema digestivo. Es decir, desde la boca, por el estómago y tu intestino delgado donde se absorben los nutrientes. Es decir, si comes una pizza, ingresará a formar parte de tu cuerpo en pequeñísimas partículas mejor llamados carbohidratos (la masa de la pizza), fibras (depende si tiene vegetales o productos integrales), aminoácidos (si posee algún tipo de proteínas o carne), minerales (como la sal que posee) y vitaminas (incluidas en todas las frutas y verduras).
Si viéramos la pizza de esa manera, incluso se ve muy saludable. Y por eso es que no te negamos a comer sino a comer de forma equilibrada. Ya que, el mayor problema son las grasas saturadas y grasas trans (principalmente en los alimentos de origen animal). Las cuales son muy difíciles de eliminar del organismo y a veces hasta imposible.
Resumiendo todo, podemos hablar de las famosas calorías. Cada alimento anteriormente mencionado posee un porcentaje de calorías que ingieres cada vez que comes algo. Para una persona adulta por ejemplo, se recomienda que consuma un aproximado de 1200 calorías diarias solo para mantener las funciones vitales del organismo (a esto se le llama metabolismo basal) y un extra de 800 calorías para las actividades diarias. Obviamente esta cantidad cambia según la estatura, edad, y actividades físicas que las personas realicen.
Con estos datos podrás calcular un aproximado de la cantidad de kcal. Para que tu metabolismo basal funcione adecuadamente:
Hombres: (10 x peso en kg) + (6,25 × altura en cm) – (5 × edad en años) + 5
Mujeres: (10 x peso en kg) + (6,25 × altura en cm) – (5 × edad en años) – 161
Y, debes agregar a esa cantidad de calorías, la cantidad que realizas de actividades físicas de los siguientes datos:
Poco o ningún ejercicio: Calorías diarias necesarias = RESULTADO ANTERIOR x 1,2
Ejercicio ligero: (1-3 días a la semana) Calorías diarias necesarias = RESULTADO ANTERIOR x 1,37
Ejercicio moderado: (3-5 días a la semana) Calorías diarias necesarias = RESULTADO ANTERIOR x 1,55
Ejercicio fuerte: (6-7 días a la semana) Calorías diarias necesarias = RESULTADO ANTERIOR x 1,725
Ejercicio muy fuerte: (dos veces al día, entrenamientos muy duros) Calorías diarias necesarias = RESULTADO ANTERIOR x 1,9
Recuerda que los alimentos son el combustible que tu organismo necesita para realizar y llevar a cabo todas las actividades que realizas diariamente. Desde hacer latir tu corazón, hasta trabajar o estudiar. Por eso debes prestar atención a los estilos de nutrición que llevas.
Muy buen artículo, creo que es importante que todos los alimentos que ingerimos sea a conciencia, elegir alimentos nutritivos y en lo posible dejar los alimentos que sabemos que no son buenos para la salud (como los alimentos de origen animal).