Identidad profesional y buena dirección
«Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes: Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya dado. Pues, así como cada uno de nosotros tiene un solo cuerpo con muchos miembros, y no todos estos miembros desempeñan la misma función, también nosotros, siendo muchos, formamos un solo cuerpo en Cristo, y cada miembro está unido a todos los demás». Romanos 12:3-5, Nueva Versión Internacional online.

La dirección escolar, además de su papel administrativo, también debe ejercer un liderazgo pedagógico, ya que su gestión logra efectos diferenciales en el aprendizaje y mejora de la institución escolar. Si los directivos de la institución pueden beneficiar a toda la comunidad escolar al crear oportunidades para que los docentes, en su conjunto, desarrollen un mejor quehacer. Además, todo directivo debería tener un claro sentido de implicación personal y compromiso moral que transmitir a sus colegas mediante sus prácticas de liderazgo y fortalecer la identidad profesional e institucional.

El concepto de identidad implica cierta complejidad, porque no es una realidad objetiva ni es igual que un papel o función. Es más bien una construcción discursiva y mental que los individuos emplean para expresar un determinado modo de verse y sentirse en relación con su medio. La identidad profesional se construye en un proceso y espacio relacional. A su vez, también es una construcción subjetiva y una inscripción social.

La identidad profesional se construye mediante un ejercicio continuado de buenas prácticas. El reconocimiento de esta identidad por parte de la comunidad educativa logrará modificar y/o fortalecer las identidades preexistentes. Esta identidad profesional está en el centro del ejercicio del liderazgo.

Visto de otro modo, las decisiones de la dirección escolar podrán ser reconocidas más allá de la comunidad escolar; pero por sobre todo, por los colegas docentes, por los estudiantes y sus padres. Este reconocimiento estará dado por la autonomía y capacidad para tomar decisiones para el bien de la comunidad escolar.

Bolívar, A., Cruz, C., Ritacco, M. y Amores, F. (2018). «Investigar la identidad profesional de la dirección escolar. Una nueva línea de investigación sobre liderazgo escolar exitoso», en I. Del Arco y P. Silva (Eds.), Tendencias nacionales e internacionales en organización educativa: entre la estabilidad y el cambio. Madrid: Wolters Kluwer España S.A.

Bolívar, A. y Ritacco, M. (2016). «Identidad profesional de los directores escolares en España. Un enfoque biográfico narrativo», en Opción, 32, 163–183.

Cantón, I., García-Martín, S. y Ferrero, E. (2018). «Identidad profesional docente. La perspectiva de los maestros actuales y futuros», en I. Del Arco y P. Silva (Eds.), Tendencias nacionales e internacionales en organización educativa: entre la estabilidad y el cambio. Madrid: Wolters Kluwer España S.A.