
“El ejercicio de la fuerza es contrario a los principios del gobierno de Dios; él desea tan solo el servicio de amor; y el amor no puede ser exigido; no puede ser obtenido por la fuerza o la autoridad. El amor se despierta únicamente por el amor.” (Elena de White, El Deseado de todas las gentes, versión online)
Encontrar una disciplina equilibrada, que edifique sin dejar heridas es el desafío de todos los padres cuando están en la etapa de crianza de los hijos. Según su formación y sus conocimientos buscan la mejor forma para educarlos desde su nacimiento en adelante. Pero, ¿de dónde obtener los mejores consejos para la disciplina de los hijos?
La Biblia es sin duda la fuente inagotable de sabiduría que tanto necesitan los padres en período de crianza y formación, y es descrita como la fuente que sacia toda necesidad del ser humano (Juan 6:35). Además, podemos añadir los escritos de Elena de White, y otros educadores y autores más contemporáneos, tales como Donna Habenicht y Kay Kuzma.
Este tema es inagotablemente extenso; sin embargo, a continuación se comparten algunas citas bíblicas y de los escritos de Elena de White con el fin de brindar ayuda a los padres.
Referencias bíblicas
Extraídas de la versión Reina-Valera revisada en 2015:
- “Instruye al niño en su camino, y aun cuando sea viejo no se apartará de él” Proverbios 22:6
- “Con misericordia y verdad se expía la falta y con el temor del Señor uno se aparta del mal” Proverbios 16:6
- “Y ustedes, padres, no provoquen a ira a sus hijos, sino críenlos en la disciplina y la instrucción del Señor” Efesios 6:4
- “Solamente guárdate y guarda diligentemente tu alma, no sea que te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni que se aparten de tu corazón durante todos los días de tu vida. Las enseñarás a tus hijos y a los hijos de tus hijos.” Deuteronomio 4:9
Escritos de Elena de White
- “El objeto de la disciplina es educar al niño para que se gobierne solo. Se le debería enseñar la confianza en sí mismo y el dominio propio […] Ayudadle a ver que todas las cosas están sujetas a leyes y que la desobediencia conduce, al fin, al desastre y el sufrimiento. Cuando Dios prohíbe una cosa nos amonesta, en su amor, contra las consecuencias de la desobediencia a fin de salvarnos de daños y pérdidas.” (La educación, versión online).
- “Demandad obediencia en vuestra familia, pero al hacer esto, buscad al Señor con vuestros hijos y pedidle que venga y dirija. Vuestros hijos quizá hayan hecho algo que demande castigo, pero si los tratáis con el espíritu de Cristo, los brazos de ellos ceñirán vuestro cuello, se humillarán delante del Señor y reconocerán su error.” (Conducción del niño, versión online).
- “Antes de corregirlos, pedid a solas al Señor que ablande y subyugue el corazón de vuestros hijos y que os dé sabiduría para tratarlos. Ni en un solo caso he sabido nunca que haya fracasado este método. No podéis hacer que un hijo comprenda cosas espirituales cuando el corazón esté conmovido por la pasión.” (Conducción del niño, versión online).
- “La severidad y la justicia, cuando no están mezcladas con el amor, no guiarán a vuestros hijos a hacer lo correcto. Advertid cuan prestamente se despierta en ellos el espíritu combativo… Dense las manos el amor y la justicia en todo vuestro trato, y con seguridad tendréis la ayuda de Dios para cooperar con vuestros esfuerzos.” (Conducción del niño, versión online).
Preguntas para dialogar y aplicar en familia
- ¿La disciplina que aplico está conforme a lo que Dios quiere?
- ¿Qué puedo mejorar de la disciplina que utilizo con mis hijos?
- ¿Cuál de las citas antes expuestas me pueden ayudar como padre o madre?
Te invito a orar cada día para pedir a Dios la sabiduría y fuerza necesaria para que la disciplina que apliques en tu hogar forme hijos e hijas victoriosos para esta vida y la venidera.
Deja tu comentario